Wednesday, February 21, 2007

CORNERSTONE “Two Tales Of One Tomorrow”

(Massacre / Mastertrax)

Tras una larga espera desde hace cuatro años por fin podemos disfrutar de la nueva entrega en estudio, con directo de por medio en 2005, de esta banda que disco tras disco se ha convertido en una de mis debilidades dentro del hard rock de corte clásico desde que a principios de siglo publicaran su magnífico debut “Arrival”. Una banda que empezó a llamar la atención por aquel entonces, y en la que encontrábamos a dos viejos conocidos, el magnífico Doogie White que se dio a conocer cuando se hizo cargo de las voces del último disco de los añoradísimos Rainbow y el brillante bajista co-fundador de Royal Hunt, Steen Mogensen. Ambos han seguido de la mano todos estos años y han ido labrándose una buena reputación y consolidando una competente formación a base de publicar grandes trabajos, algo que vuelven a repetir con este “Two Tales Of One Tomorrow”, ya cuarto de estudio en su trayectoria. Una vez más vuelven a contar con los tres importantes músicos que ya participaban en su anterior entrega “Once Upon Our Yesterdays”; esto es, el guitarrista Kaspar Damggard que hace una buenísima labor con su inexcusable influjo Blackmore, el teclista Rune Brink que también se hace notar en buena medida, y el compañero de Moggesen en Royal Hunt, Allen Sorensen que se hace cargo de las baquetas. Y afortunadamente todos ellos vuelven a ofrecernos un trabajo sin sorpresas, nada de experimentos raros, nada de moderneces estériles, y sólo puro hard rock de calidad, de aires clásicos, con toques sinfónicos y composiciones elaboradas y brillantes. Un trabajo para escuchar con tranquilidad y disfrutar de sus numerosos matices y momentos de clase e intensidad que nos ofrecen, sacrificando en gran medida los temas facilones y más “comerciales”, pero llegando a unas cotas de calidad al alcance de pocos a estas alturas. Desde el inicio con “Misery” ya vemos que estamos ante una gran obra, el espíritu Rainbow sobrevuela el tema desde su primer acorde, con White brillante y llenando de intensidad un corte de currada estructura compositiva. Algo más oscurillos se ponen con “One Mans Hell” recordando más a los más melódicos Black Sabbath de Dio, al igual que sucede en la más lenta “Blinded”, en ambas sobresaliente la labor del guitarrista Kaspar Damgagard, y en la más moderna sin excesos “Prey”. La vena Rainbow de la última época de Doogie White vuelve a hacerse totalmente presente con la más pesada “Mother Of Mercy” y con la buenísima con toques cíngaros que da nombre al disco, con solo totalmente Rainbow, al igual que en la más movida “Starlight And Mystery” donde brillan los teclados de Rune Brink recordando a la ex banda de Mogensen y Sorensen. Algo más pesadas y menos brillantes me parecen “The Dance” y “Wicked”, aunque tampoco sobran, al igual que la final “We Are The Dead” que tira más de épica conformando el corte más extenso del trabajo en sus casi siete minutos. De nuevo un buen disco de Cornerstone que cubre las expectativas de los que les seguimos. A continuar así.

Mariano Palomo

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