MASTERPLAN “MK II”

(AFM / Avispa)

Algo mas de cuatro años han transcurrido desde que el guitarrista de Heavy Metal, Roland Grapow, como alma mater del proyecto, uniera sus fuerzas y capacidad creativa a la de su compañero durante una larga temporada en la banda alemana Helloween, Uli Kush, (batería), y a la que ya, se estaba fraguando y en la actualidad creo que lo es, la voz del Hard Rock, Jorn Lande. Bajo el nombre de Masterplan, dos magníficos trabajos los avalaron, su homónimo y “Aeroautics”. La formación, aunque con un estilo influenciado, como es normal, por los géneros absorbidos por lo músicos a lo largo de su carrera, sonaba diferente, mostrando un sonido entre clásico y a la par innovador, con ritmos en ocasiones algo oscuros, mezclados con la rapidez que determina este género y con unas armonías de gran potencia y a la vez melódicas. Todo esto, sumado a la voz y forma de modular de Lande, crearon una banda prácticamente con estilo propio. Tiempo después, debido a la diferencia de caminos a seguir en los estilos musicales de estos, los componentes principales de la banda, y después de la gira de su segundo trabajo, el grupo prácticamente se disgregó. En ese momento, (como comentaba Grapow en una reciente rueda de prensa a la que tuvimos la suerte de asistir), había dos opciones; Olvidar el proyecto que tanta calidad había cosechado, o, intentar continuar con mas fuerza y esperanzas que nunca. Y así ocurrió. El batería Uli Kush fue sustituido por la bestia de la baquetas y un clásico ya dentro del mundo del Heavy Metal, Mike Terrana, y a la voz, otro reputado del medio como es Mike Dimeo, (Ex Riot), sucedería a Lande. Ahora, con una plantilla renovada y bajo el título de "MK II", (Mark 2), Masterplan vuelve a otear el horizonte. Continuando con su camino de Heavy Hard, esta nueva creación, con doce temas de contenido, no tiene nada que anhelar a sus predecesoras. Cortes cargados de fuerza y colmados de detalles como se puede apreciar en “Warriors Cry”, “Masterplan”, “Keeps me Burning”, (a la altura de los ya clásicos “Heroes” o ”Wounds”), “Watchin The World” y “Take Me Over”. Medios tiempos repletos de calidad y potencia como pueden ser “I´m Gonna Win”, “Call The Gipsy” o “Lost & Gone”, de los mejores del CD y destinado a ser otro corte principal sus directos. El resto de la banda complementada por Axel Mackenrott a las teclas y Jan S. Eckert al bajo, cumplen perfectamente con su cometido como cabía esperar mientras Terrana, machaca su máquina hasta la extenuación, algo que por otra parte viene siendo habitual en el afamado músico. Después de repetidas escuchas del CD y sin desmentir nada de lo expresado anteriormente, debo decir que quizás se pueda apreciar una pequeña diferencia compositiva debido al “abandono” de Lande, pero el nivel sigue siendo extraordinario. A este, por supuesto, se le echa de menos, sería casi imposible a mi parecer y sin que parezca una idea descabellada, el no hacerlo, pero Di Meo ha suplido con creces y mejor de lo que se podría esperar, si cabe, y sin desmerecer por supuesto, la capacidad vocal de su antecesor con un registro muy similar y un nivel extraordinario. Por suerte, el Plan Maestro continua fraguándose y de él se seguirán surgiendo grandes historias.

Sergio Zapata

ALMAH “Almah”

(AFM / Avispa)

El vocalista de Angra, Edu Falashi presenta en estos días su nuevo proyecto discográfico. Bajo el nombre de Almah se ha marcado once temas de buen heavy metal, bastante variados, en general bastante agresivos y en los que podemos apreciar su poderío vocal y las melodías que tampoco se esconden, y se nos llenan los oídos con buenos sonidos de guitarras bien arreglados, sobre una rotunda base en la que sobresale el doble bombo. Además Edu ha contado con colaboradores de auténtico lujo, nada menos que el guitarrista de Nightsiwh Emppu Vourinen (que igual saca un disco de A.O.R. fiestero con Brother Firetribe que experimenta en este trabajo), el buen bajista de Stratovarius Lauri Porra, y el magnífico batería de Kamelot Cassey Grillo. También colaboran como invitados los guitarristas Mike Stone (Queensryche) y Edu Ardanuy (Dr. Sin) que aportan buenos toques en algunos solos del disco. A todo ello pone la guinda la buena producción de Adriano Daga, no muy conocido para el gran público metalero, pero que ya acumula un amplio currículo a sus espaldas. Se abre el disco de forma contundente con “King” un tema denso y potente en el que Falashi muestra su faceta más agresiva de su voz; se pone más melódico en “Take Back Your Spell” que recuerda bastante a sus Angra, pero con un punto más de potencia a pesar de los buenos arreglos que la adornan. Se tranquiliza bastante en “Forgotten Land” donde intuyo que la mano de Mike Stone se deja notar, con su buen trabajo de guitarra compartiendo protagonismo con el piano en un intensa y desgarrada power ballad que recuerda su banda de Seattle, con un maravilloso solo incluido. Vuelta a la caña con “Scary Zone”, menos brillante pero intensa en cualquier caso, al igual que “Children Of Lies” donde los arreglos orquestales destacan pero sin perder nada de potencia y con un break en mitad del mismo en el que vuelven a acelerarse. El heavy más clásico de estribillo alto y guitarras potentes se hace presente en “Break All The Welds”, convirtiéndose en una de las que más me han convencido a pesar de su ambiente oscuro, pero nítido. Por el contrario más original resulta “Golden Empire”, más experimental con buenos juegos de voces a cargo de Falashi en un tema menos acelerado con pequeños retazos góticos. Giro total con la balada de corte acústico “Primitive Chaos” que va tomando cuerpo en su desarrollo que junto a la melódica “Breathe” que roza el medio tiempo sirve como calmado preludio, a la más progresiva “Box Of Illusion” donde los teclados destacan junto a la buena base de Porra y Grillo creando uno de los cortes más curiosos del disco. El cierre total culminando esta última parte más relajada del disco la pone el tema título del disco, de nuevo con las guitarras acústicas presentes en un bonito tema, pero que quizá tras tanta tranquilidad acaba haciéndose un poco pesado tras la caña con la que nos aborda en su primera parte del trabajo. En cualquier caso disco interesante, bien trabajado, con buenos músicos, y en el que Falashi y compañía muestra su nivel y sus ganas de ofrecer cosas nuevas. Bienvenido sea.

Mariano Palomo

JORN "The Gathering" / "Unlocking The Past"

(Frontiers / Mastertrax)

Nombre conocido: Lande, Jorn
Edad: Se cree que tiene 38 años
Nacionalidad: Posiblemente Noruego.
Ocupación: Nómada, también canta de vez en cuando.
Grupos de afiliación conocidos: En 1993 apareció en la escena con la formación Vagabond, junto a el maestro de las 6 cuerdas, Ronnie Le Tekro, (TNT); tiempo después convivió con Micky Moody, Bernie Marsden y sus The Snakes. Años mas tarde unió sus fuerzas en un proyecto apodado Ark, junto a el ex-Conception, Tore Otsby y el batería John Macaluso. Corría el año 2000, cuando se le relacionó con el también guitarrista americano Ralph Santolla y su banda Millenium; después de editar tan sólo un disco, cuentan que cometió el mayor error de su vida, aliarse con el crack de la guitarra Yngwie J. Malmsteen. Tardó tiempo en recuperarse de aquel infierno pero allá por el 2003, pudo recomponer su vida al tomar contacto con Roland Grapow, Uli Kusch y su banda, lo cuales decían tener un “Masterplan”, donde gozaría años de grandes éxitos. El resto de su recuperación, fue debida, en gran parte a sus triunfos en solitario, que al fin y al cabo, es donde mejor Jorn “existe”.
Por otra parte, cuentan leyendas que lo relacionan con un tal Russell Allen, (Symphony X), con el que se comenta, tuvo una gran “Batalla”, aun sin acabar y a la vez lo elevan hasta codearse hasta con los mas Altos Señores de la Historia del Hard Rock y el Heavy Metal.
A día de hoy, se desconoce su paradero real. Lo único que se percibe de sus circunstancias, es que, de ésta, su historia, el 26 de Enero de 2007, se editan 2 Cds, bajo el nombre de “The Gathering” y “Unlocking The Past”. Lo que se podrían considerar, que de hecho lo son, 2 vistas del pasado actualizadas.
Hasta aquí, su historia. Ahora la realidad.

***Fragmentos escogidos de los archivos perdidos del Capitán Pinkiller***

La primera obra, lleva por título, “Unlocking The Past”, consta de diez cortes, todos versiones, la mayoría sin muchos cambios, (pero siempre impartiendo ese estilo propio), las cuales, perfectamente se podrían considerar parte de las influencias musicales a lo largo de su vida. Cortes algunos, por otra parte, de la etapa con Ralph Santolla, los cuales quedaron sin editar por falta, se supone, de espacio. De hecho, uno de ellos, repite “On & On” de M.S.G. El resto:
“Fool For Your Loving”-Whitesnake
“Cold Sweat”-Thin Lizzy
“Lonely Is The Word/Letters From Earth- Black Sabbath
“Burn”-Deep Purple
“Feel Like Making Love”- Bad Company
“Kill The King”-Rainbow
“Perfect Strangers”-Deep Purple
“Naked City”-Kiss
“The Day The Earth Caught Fire- City Boy

Al mismo tiempo, “The Gathering” nos muestra a lo largo de 16 temas, gran parte de su extenso y variado recorrido musical. The Snakes, Ark o Mllenium, son algunas de las bandas de las que deja constancia en este nuevo-viejo CD. Cortes, algunos de ellos, rebautizados con una nueva producción o grabación, ya que en su momento no habían tenido el sonido correcto o que a Jorn le hubiera gustado. Otros simplemente con la inserción de algún que otro efecto, pista de complemento o adorno; y otros simplemente , tal como estaban ya grabados porque como explica el vocalista, merecían otra oportunidad.
La lista en cuestión es:
Ark - "Where The Winds Blow"
The Snakes - "Gonna Find The Sun"
Millenium - "Hourglass"
Allen/Lande - "My Own Way"
Jorn -"Starfire" - "Gate Of Tears", "Abyss Of Evil"
Jorn - "Worldchanger" - "Tungur Knivur", "Sunset Station", "House Of Cards", "WorldChanger", "Christine", "Bridges Will Burn"
Jorn - "Out To Every Nation" - "Young Forever", "Something Real", "One Day We Will Put Out The Sun"
En estos dos trabajos, le acompañan, entre otros, músicos del calibre de Ronnie Le Tekro o Ralph Santolla a las guitarras; John Macaluso o Jaime Salazar a las baterías; Morty Black al bajo o las teclas de Don Airey.
De su voz, sólo decir que se podría considerar, en la actualidad, como el mejor vocalista de Hard Rock y el Heavy Metal. Con una modulación capaz de emitir desde un tono claro y agudo al grave más oscuro e infernal, acompañado todo con un extraño descompás que sólo Jorn hace vulgar y único a la vez. Destinados a ser de los mejores de 2007
Jorn, ha vuelto.... del pasado.

Sergio Zapata

PRIMAL FEAR “Metal Is Forever”

(Nuclear Blast)

Desde que hace unos cuantos meses se anunció el cambio de compañía de Primal Fear, era inevitable que sucediera lo habitual en estos casos: que la anterior casa saque un recopilatorio con todo lo editado hasta la fuga. Ni me he molestado en enterarme de si Ralf, Matt y compañía han tenido algo que ver con este lanzamiento. Todos sabemos de antemano la respuesta. Dejando aparte este tipo de consideraciones, la verdad es que el álbum no está nada mal. Por supuesto, siempre es inevitable que eches de menos alguna canción, cada cual tiene sus favoritas, y es imposible contentar por completo a todo el mundo. Pero, en este caso, se ofrece una visión bastante global de los seis discos publicados por Primal Fear, aparecen como mínimo dos temas de cada uno de sus trabajos. Y no falta ninguna de las imprescindibles, habría sido un disparate dejar fuera, por ejemplo “Chainbreaker” o la magistral “Metal Is Forever”, quizá la mejor composición de toda su historia, por algo la han elegido para dar título al CD. Quizá habría sido preferible ordenar los cortes por su orden cronológico. Además, no habría sido mala idea desglosar en el libreto los músicos que grabaron cada disco, y así poder seguir los cambios de formación. Al menos aparecen fotos de todas las etapas, y vienen también las letras, algo por desgracia poco frecuente. Es la presentación idónea para quien conozca poco o nada de la banda germana. Vale, eso está muy bien para los fans nuevos, pero... ¿y para los que los venimos siguiendo desde siempre? Pues también tenemos un gran aliciente en el segundo CD, donde vienen juntas todas y cada una de las versiones grabadas por Primal Fear a lo largo de su historia. Algunas ya venían en sus propios discos oficiales, como “Speedking” o “Die Young”. Otras, en cambio, venían repartidas por singles o discos homenaje, como “Seek & Destroy” o “Two Minutes To Midnight”. Es la oportunidad perfecta de juntarlas todas. ¿Cuál es la que mejor les queda? Bueno, es una obviedad decir que el “Metal Gods” de Judas, en eso somos todos unánimes. Quizá en segundo lugar la más lograda para mi gusto (y esto es una mera opinión, claro), es “Breaker”, de sus compatriotas que no hace falta ni mencionar. En fin, el recopilatorio es atractivo para todos sus seguidores, ya sean antiguos o nuevos. Hay que reconocer que Nuclear Blast, aunque con fines oportunistas y comerciales, ha sabido idear bien las cosas.

Nacho Jordán

PAGANIZE “Evolution Hour”

(Candlelight Records / Goi Music)

Desde las frías tierras noruegas llega a nuestras manos este trabajo de debut del quinteto Paganize. Una joven y prometedora formación que en sonido de poderoso heavy metal de arraigada tradición ochentera pero con el aire actual del 2007 y mirando más allá del Atlántico con recuerdos a formaciones del buen metal americano como Malice, los primeros Queensryche, Lizzy Borden o incluso los Beyond Fear de Tim Owens. Aun así los duelos de guitarra son de los más clásico de la escuela europea en onda Maiden, Judas, muy bien ejecutados por la pareja de afilados hachas Stian Mausethagen y Thomas Rokne, siguiendo el potente ritmo marcado por el bajista Tor Seltveit y el técnico percusionista Trym Torson que lleva las riendas de la banda junto al buen vocalista Geir Helge Fredheim. Los temas resultan sólidos y convincentes, con un excelente sonido y mostrando una buena capacidad instrumental, aunque algo enrevesados en lo que a composición se refiere, y bastante contundentes en general, como por ejemplo “The Hour” con un riff directo sobre un acelerado doble bombo que sirve perfectamente para adentrarnos en la obra. Más pesada es “Conscience” con menos velocidad, pero con una buena dosis de intensidad, al igual que “Dark” que se mueve en parámetros más dinámicos y ochenteros. “Holow” baja un poco el nivel haciéndoseme más espesa y oscura, mientras que “Turn Of The Tide”, “Mary King’s Close” y “The Wraith” recuperan la velocidad con buenas guitarras aunque un poco atropelladas. Vuelta más clásica en “Divinity In Vain”, algo monótona, con cierto regusto oscuro, mientras que “Blind Eyes” y “Unfolded” tienen más garra sobre todo por la voz de Fredheim en sus tonos más agresivos y por la variedad de ritmos que contienen. Un interesante y curioso compendio de cortes que muestra las intenciones de estos chicos y que quizá puliendo un poco más sus composiciones y haciéndolas algo más dinámicas pueden ser una buena apuesta de futuro, el primer paso está dado.

Mariano Palomo

THE POODLES “Metal Will Stand Tall”

(AFM / Avispa)

Unos cuantos meses después de la publicación a través de una pequeña compañía independiente, la gente de AFM rescata para su publicación y difusión global este interesantísimo trabajo de debut de los suecos The Poodles. Un grupo formado por experimentados músicos de la escena escandinava, como el vocalista Jakob Samuel, el guitarrista Pontus Norgen, el bajista Pontus Egberg y el batería Christian Ludqvist, que se han marcado un disco realmente bueno. Sobre una base de puro hard rock melódico como casi sólo saben hacerlo en el norte de Europa, han sido capaces de crear una docena de temas frescos, originales, pegadizos y en absoluto repetitivos. Cada uno tiene su propia personalidad e historia, desde un comienzo lleno de clase y melodía que roza el medio tiempo con “Echoes From The Past” en el que ya empiezan a brillar la voz de Samuel y los coros de sus compañeros, además del buen hacer guitarrero de Norgen. El tema que da título al disco “Metal Stand Tall” comienza con aire más moderno, con unas guitarras a lo Freak Kitchen y rompe con magnífico estribillo y estrofa a coro que se clava sin remedio en nuestra cabeza. La faceta más comercial viene con “Night Of Passion” un perfecto single pegadizo y accesible, lleno de melodía pero sin olvidar las buenas guitarras. Rompiendo completamente con lo anterior aparece de repente “Song For You”, un curioso tema que comienza con una voz de tenor en italiano que da paso a unos coros de todo el grupo en una pieza ciertamente difícil de clasificar. El tema oscuro y sombrío, como su nombre indica, viene con “Shadows” en su inicio para desarrollar un tema más heavy pero sin dejar de lado la melodía, sobre todo en las guitarras de Norgen. Nuevo giro con “Lie To Me”, un tema más hard rockero con buenos cambios marcados por guitarras acústicas y eléctricas, aunque no excesivamente brillante. Vuelve la vena tranquila con “Rockstar” un medio tiempo casi balada que no me acaba de convencer, se me hace algo sosa. Todo lo contrario que la muy buena versión que se marcan del clásico de los iconos del tecno ochentero Ultravox, ya versionada por más de una formación hard rockera y es que cuando un tema es bueno y se sabe adaptar bien da igual del estilo que sea. Más actual suena “Don’t Give Up On Love”, con un potente inicio manteniendo su poderío hasta el final, con unos maravillosos coros y líneas vocales muy melódicas, y con uno de los mejores solos de guitarra del disco. El espíritu rock and rollero se hace notar en “Number One” más básica, pero igualmente brillante y pegadiza, al igual que la fantástica “Kingdom Of Heaven”, que me recuerda mucho en su melodía a Takara o Talisman, formación en la que también prestó sus servicios Pontus Norgen. Cierre sensible con “Crying” una buena balada en la que sin demasiados aspavientos si consiguen transmitir una buena dosis de feeling, y que redondea un disco altamente recomendable y que puede cubrir el hueco dejado por Europe con sus dos últimos trabajos para sus fans de siempre en el siglo XXI.

Mariano Palomo

NOSTRADAMEUS “Pathway”

(AFM / Avispa)

En un par de semanas se pondrá a la venta el cuarto trabajo de los suecos Nostradameus. Una de las muchas formaciones de heavy metal melódico surgidas en los últimos años en el viejo continente y que en esta nueva entrega se han adentrado en terrenos más oscuros y contundentes, dejando a un lado su faceta más power virtuosa y haciendo temas más rotundos y pesimistas me atrevería decir. Todo ello implica, como cualquier cambio o evolución, sus pros y sus contras. Pros, la solidez que ha ganado el sonido del grupo y la energía que desprenden; contras, la espesura de algunas de sus composiciones, sobre todo en la primera parte del disco, la escasez de sonidos brillantes y fácilmente llegaderos, el disco necesita de más de una y de dos escuchas para ir cogiéndole el punto, que por otra parte lo tiene. Sobre todo lo más destacable es la contundencia y presencia de la base formada por el bajista Thomas Antonsson y el batería Esko Salow, mientras que las guitarras de Jake Freden y Lennart Specht cumplen sin demasiados alardes, y la voz de Freddy Persson se muestra tan personal como falta de matices. Como comentaba antes, la primera parte del disco, con temas como “Wall Of Anger”, “Until The End” o “Demon Voices” se me hace bastante espesa, los tres cortes muy parecidos descargando caña sin apenas matices y algo aburrido. Se produce un notable giro con el cambio que suponen las dos partes de “MDCC a.d.”, una primera más breve y lenta a modo de intro en la que encontramos un brillante solo de guitarra que precede a una dinámica segunda parte, en la que además de mantener la intensidad y potencia de los primeros temas la cosa se hace más atractiva con cambios de voces y solos más limpios. De aquí al final se mantiene un nivel bastante aceptable, con “P.I.R.” o “No Trace Of Madness” en las que los juegos de voces se hacen más presentes y directos. La parte tierna tras tanta agresividad viene con “Not Only Women Bleed” una correcta balada con piano incluido y donde la voz de Persson se hace más melódica, aunque igualmente intensa. El cierre definitivo lo ponen la coreable “Death By My Side” que es mi favorita del disco, y con la más acelerada “The Untochables” en la que de nuevo los coros se hacen notar. En definitiva un disco correcto, sin demasiados matices, y que me temo se perderá en el marasmo actual de lanzamientos del estilo.

Mariano Palomo

HEAVENLY “Virus”

(AFM / Avispa)

Nuestros vecinos franceses no son excesivamente prolijos en lo que a exportar bandas de heavy metal se refiere, pero la verdad es que cuando alguno de sus grupos se deciden a salir fuera de sus fronteras y a darse a conocer suelen sorprendernos gratamente. Esto ya nos ocurrió con la formación que nos ocupa, los parisinos Heavenly, desde su primera entrega “Coming From The Sky” que vio la luz en el 2000 y hasta este ya cuarto trabajo “Virus” en el que evidencian una notable progresión y mejoría, sin perder nada de su esencia primigenia. Una esencia de puro power metal muy melódico, bien ejecutado, en absoluto falto de fuerza, con toques orquestales y progresivos y con un buen compendio de temas que colocan al grupo dentro de los más interesantes del estilo. Destaca dentro de este “Virus” la buena factura instrumental de sus temas, bastante versátiles y para nada planos, bien redondeados por la voz de Ben Sotto que cumple muy bien dentro de algunos cortes bastante exigentes, recordando por momentos a Kai Hansen, y por un sonido más que convincente sobre todo a cargo de los guitarristas Charley Corbiaux y Olivier Lapauze que me da la impresión que han escuchado mucho a Gamma Ray y a Angra, auténticos ídolos en el país vecino. Tampoco es desdeñable el trabajo del bajista Matthieu Plana y del poderoso batería Thomas das Neves, otorgando una solidez considerable al sonido del grupo. Los temas en general son bastante rápidos y contundentes, pero sin olvidar en ningún momento la melodía y algún que otro adorno realmente interesantes. La inicial “The Dark Memories” es un buen ejemplo, con un ritmo acelerado a base de doble bombo, con riffs afilados, y buenas líneas vocales bastante melódicos; melodía que se acentúa en “Spill Blood On Fire”, algo más épica y con unos buenísimos coros y unas guitarras limpias y claras. Sale a relucir la vena más power a lo Gamma Ray con el tema que da título al álbum, un tema claro y potente al que sucede “The Power & The Glory” en la misma onda, pero un pelín más speedica. Algo más progresivos, con cierto aire Royal Hunt se muestran en “Wasted Time”, no sólo por el título, y donde los teclados toman mayor protagonismo dando un rollo muy interesante a un tema bastante más duro en su concepción que se atempera con las teclas y guitarras más melódicas. Más previsible y normalita me resulta “Bravery In The Field”, de nuevo con la alargada sombra de los Rayos Gamma proyectada sobre ellos, mientras “Liberty” y “The Prince Of The World” son más claras y directas con un sonido más melódico y accesible. La curiosidad viene con la versión de la ochentera Pia Zadora, “When The Rain Begins To Fall”, una conocida canción pop tipo “Flashdance” que los galos adaptan a su estilo bastante bien respetando la línea melódica del tema, parecido a lo que han hecho los transalpinos Trick Or Treat en su disco con el “Girls Just Want To Have Fun” de Cindy Lauper. Una buena referencia la de los italianos para situar a Heavenly que parecen querer dar el salto definitivo de calidad en la escena metalera europea, aunque puede que aun les quede un escalón por subir, de momento la cosa parece que va bastante bien.

Mariano Palomo

DOLLHOUSE “Royal Rendezvous”

(Bad Reputation / Goi Music)

Apadrinados por Michael Davis de MC5, estos cuatro rockeros suecos empezaron a dar sus primeros pasos en 2003, y ahora cuatro años después nos presentan ya su segundo trabajo “Royal Rendezvous”. Influenciados clarísimamente por el rock setentero de bandas como los propios MC5, Led Zeppelin, Jimi Hendrix o los Who más rockeros, nos ofrecen nueve temas que nos transportan a pequeños garitos de ambiente lisérgico llenos de humo y alcohol, y con un sonido que me da la impresión que debe funcionar bastante mejor en directo de lo que lo hace en disco. Y digo esto, además de que esta música está mucho más orientada a los escenarios que a los estudios, porque el sonido del redondo me resulta falto de brillo, aunque con una base rítmica realmente interesante y potente a cargo del bajista Yoda Chrome, y sobre todo del batería Marcus S. Davis. Por el contrario la aportación de las guitarras de Andreas Heed y del también cantante Chris Winter me parecen menos interesantes, bastante previsibles, y en ocasiones algo pesadas. El álbum se abre de forma más que prometedora con el primer single “The Rock & Soul Fever”, con un feeling magnifico y con un sonido de batería que recuerda al mismo Keith Moon, todo un pelotazo en la cara para ir abriendo boca. Sigue la cosa bastante bien con “Let’s Get It On” de inspiración claramente Hendrix, con un buen y pegadizo estribillo, pero evidentemente lejos de la brillantez guitarrera del mítico hacha. “Living Tomorrow” sigue recordando a unos Who acelerados, mientras que en “With My Heart & Soul” la cosa se pone bastante espesa, en onda Zeppelin de los menos brillantes. Recuperan el pulso más rockero con “Do You Know What I Mean” y “Dead Man’s Hand”, con ese punto ácido americano que da la voz distorsionada, al igual que “The Worried Blues”, con el rollo bluessy que indica su título. Encaran la recta final con la correcta, pero algo plana “Hard To Change” y con “I Just Don’t Care” que pone el cierre con un curioso sonido de órgano en su inicio y desarrollo. Por lo demás, y características musicales y estilísticas a parte, el disco se mueve en la frontera de acabar haciéndose algo pesado, pero salvan bien el expediente por su breve duración, quizá con uno o dos temas más la cosa se hubiera puesto excesivamente espesa. Disco interesante para los nostálgicos de la Isla de Wright y de Woodstock, aunque no creo queden demasiados en pleno 2007.

Mariano Palomo

ZANDELLE “Vengeance Rising”

(Limb Music / Goi Music)

Desde que Manowar dejaron de interesarme hace bastante tiempo (probablemente tras la publicación del “Kings Of Metal”, por dedicarse más a ir de salvadores del metal que a sacar buenos discos como lo fueron sus primeros trabajos) nunca me han seducido demasiado de este tipo de bandas más preocupadas por poner poses y decir lo heavies que son que por aportar algo realmente interesante a nivel musical. Y el caso de los neoyorquinos Zandelle no ha sido una excepción. Con este su cuarto trabajo los he conocido y ciertamente se ha cumplido el axioma una vez más: banda que va de auténtica (algo que por otra parte no tengo por qué dudar), portada guerrero-dragonera, estética cercana al cómic y títulos como “Dragon’s Horad”, “Queen Anne’s Revenge” o “Cry For Vengeance” de temática épica que completan un disco tan homogéneo como plano y aburrido en su desarrollo. Y el caso es que el sonido no es malo, sobre todo el de las guitarras de T.W. Durfy y Anthony Maglio, pero los temas son lineales a más no poder, batería a toda caña a cargo de Bob Delmini, voz bastante normalita del también bajista George Tsalikis, y piezas que si se escuchan por separado de una en una no están mal del todo, pero escuchar todo el disco del tirón es tarea realmente ardua. Se permiten una pequeña licencia en el minuto y medio el interludio “Invitation” en el que sólo las voces corales en plan monacal dan paso a la acelerada “Queen Anne’s Revenge” que es de las más destacadas, aunque tampoco es para tirar cohetes. Como curiosidad incluyen “The Beowulf Trilogy” con tres partes como su nombre indica pero que tampoco aporta demasiado. En fin, un disco para los muy fans del heavy más pesado y previsible y que todavía piensen que se puede salvar el mundo a base de golpes de espada y riffs de guitarra.

Mariano Palomo

TRICK OR TREAT “Evil Needs Candy Too”

(Valery Records / Avispa)

Es indudable que la huella dejada por Helloween (sobre todo en la era “Keeper”) en el metal europeo es absolutamente profunda e indeleble en la historia del género. Prueba de ello la enorme cantidad de bandas que con mayor o menor fortuna se han inspirado en el sonido de los chicos de la calabaza, e incluso las numerosas formaciones que han surgido como grupos tributo calcando el repertorio de los alemanes. Hace tiempo, probablemente desde la irrupción de Edguy ya con un nombre y un sonido más personal y reconocible, no me había sorprendido tan gratamente un grupo de las características citadas anteriormente. Estos italianos llamados Trick Or Treat cumplen todas las condiciones para ser dignos sucesores del sonido Helloween: empezaron siendo un grupo de versiones de ellos, con un vocalista realmente potente e interesante como Alessandro Conti que recuerda mucho a la mejor época del renegado Kiske, un concepto musical totalmente happy metal desde las guitarras de Luca Cabri y Guido Benedetti que se doblan continuamente creando pegadizas melodías, acompañadas por la poderosa base del bajista Leone Villani Conte y el batería Nicola Tomei, hasta el nombre del grupo, Trick Or Treat, que es la típica frase que se dice la noche de Halloween cuando se va a pedir caramelos por las casas, pasando por la portada con personajes típicos de la noche de las brujas comiendo golosinas. Todo ello adornado de buenos temas y composiciones que aun recogiendo toda la esencia de los “Keeper” sí tienen cierto toque personal y un magnífico sonido registrado en el Fear Studio de Rávena. Podemos ponerle el pero de tener demasiada similitud en los cortes, aunque con algún que otro punto original y diferente, como en los arreglos iniciales de la potente “Perfect Life”. Las melodías totalmente pegadizas de “Like Donald Duck” hacen que sea un pedazo de tema que desde su inicio con la voz del pato Donald y sus posteriores coros y estribillos rebosa optimismo y ganas de fiesta por todos lados. No se queda atrás la acelerada pieza que da título al trabajo y que lo abre tras la intro “It’s Snack Time”, un pelotazo directo y cañero para captar nuestra atención. Sieguen con “Time For Us All”, menos directa y más elaborada, al igual que la extensa “Back To Life” que con sus más de nueve minutos de duración cierra del disco. Más tranquila, pero igualmente interesante “Sunday Morning In London” donde la acústica toma el mando en un tema en el que la voz de Conti se parece más a la de Kiske, junto con la más movida “Joyful In Sadness”. En “Who Will Save The Hero” y “Back As A Pet” muestran su faceta más pesada en lo que a bases se refiere, pero con buenísimas partes vocales y de guitarras. He dejado para el final lo que ha supuesto para mi la mayor sorpresa del disco y que me parece de lo mejorcito que he escuchado en mucho tiempo en versiones, “Girls Just Want To Have Fun”, que curiosamente no es de Helloween sino de la cantante pop ochentera Cindy Lauper, y a la que sacan un excelente partido haciéndola muy muy heavy y divertida respetando su melodía y esencia original que ya eran muy buenas. Un aliciente más para hacerse con este buen trabajo de metal melódico europeo y que debe satisfacer el paladar de los más exigentes catadores del género. Muy interesante.

Mariano Palomo

WIZARD “Goochan”

(Massacre Records)

Unos veteranos del true metal alemán vuelven con nuevo trabajo para el 2007. Hablamos de Wizard, una formación que nunca ha acabado de romper para el gran público pero que siempre ha gozado del respeto y seguimiento de los más acérrimos seguidores del metal undreground centroeuropeo. La verdad es que ha mi nunca me han llamado demasiado la atención, aunque si he de reconocerles su fidelidad y perseverancia dentro de un sonido crudo y auténtico, sin florituras ni adornos, con cierto nivel técnico y de producciones de sonido, pero con temas que se me hacen excesivamente largos y pesados. Este “Goochan” que ahora nos presentan no ofrece absolutamente nada nuevo, así el heavy metal más cañero y rudo es el protagonista absoluto, como decía con bastante buen nivel técnico pero bastante aburridos compositivamente, muy lineales, y en ocasiones excesivamente cadenciosos y pesados como en “Children Of The Night“, por el contrario mucho más acelerados en la inicial “The Witch Of The Enchanted Forest “, en la más a lo Manowar “Dragons Death“ y “Return Of The Thunder Warriors“, en la machacona “Two Faces Of Balthasar“ o en la más épica “Call To The Dragon” que se sale un poco de la monotonía del disco junto con la más extensa “Pale Rider“ en la que los cambios de ritmo dejan sitio hasta para pasajes más lentos y acústicos en los que la voz de Sven D'Anna se muestra menos áspera y más cercana. Como podéis ver con este disco Wizard siguen sin convencerme demasiado, aunque seguro que los más ture metaleros estarán satisfechos con ellos, viendo que aun quedan grupos que siguen fieles y haciendo frente a la invasión del “Falso Metal”.

Mariano Palomo

DUSTSUCKER “Jack Knife Rendezvous”

(Limb Music / Goi Music)

La más pura escuela rockanrolera desgarrada, cruda y auténtica se hace presente en este nuevo trabajo de los alemanes Dustsucker. Una banda desconocida para mi hasta la fecha, y que me han sorprendido con este disco. Un disco directo, potente, descarnado y que sin duda será del agrado de los seguidores del rock más garajero, con tintes metaleros como en la speedica y guitarrera “Dead On Wheels”, en la más pesada “Under The Hammer” o en “Continental King”, y más punkies como en el caso de las aceleradas “Bleed For My Strings” o “Jack Knife Rendezvous” que bautiza al redondo. El estigma de Lemmy y sus Motörhead está absolutamente presente a lo largo y ancho de toda la obra, no sólo por la aguardentosa voz de Max Count Farmer que también rasca la guitarra junto al americano Bill Salisbury, sino por el sonido en general con ese punto justo de suciedad que imprimen a todos sus temas. La base queda menos brillante, pero sí muy contundente y machacona con la labor del bajista Danny Duster y del aporreador Marco Piermattei, conformando todos ellos un buen trabajo que puede gustar a un amplio abanico de seguidores del rock sin demasiadas pretensiones y que igual puede valer para abrir un concierto de Motörhead que de The Dictators o Exploited, y que puede servir para descargar un buen puñado de adrenalina. Los que busquen sonidos más limpios y elaborados mejor que se olviden.

Mariano Palomo

AOR “L.A. Concession” (Reedición)

(MTM Classix / Goi Music)

No hace mucho comentábamos por aquí “L. A. Attraction”, la quinta entrega del proyecto del periodista y músico francés afincado en California Fredrik Slama. Y la verdad es que podría ser igualmente válida prácticamente en su totalidad para este “L.A. Concession”, que fue el embrión de forma casi clandestina de este repoker de entregas hace ya seis años y que ahora se reedita para todos los amantes del west coast y del soft A.O.R. más técnico, tranquilo y elegante. Un estilo éste que no suelo frecuentar en exceso, sobre todo últimamente (¿me estaré embruteciendo?), pero que de vez en cuando está muy bien para disfrutar de una relajada escucha olvidándonos de frenéticos riffs de guitarra (aunque también los hay), de voces desgarradas o de bases machaconas y poderosas (aunque no por ello menos interesantes y técnicas). Además viendo el pedazo de nómina de músicos que una vez más acompañan a Monsieur Slama la clase y el nivel están asegurados, contando con gente como Steve Lukather, Jeff Porcaro, Michael Landau, Tommy Denander o Michael Thompson entre otros muchos el resultando no puede ser malo (algo aburrido en ciertos momentos para los más cañeros puede que sí, pero malo en absoluto). Encontramos dentro de los dieciséis temas del disco cortes deliciosos, como la inicial “Never Gonna Let Her Go”, en sus dos versiones, la original cantada y la instrumental que aparece como bonus de cierre junto a otras tres interesantes piezas, y que en esta segunda versión es ciertamente espectacular con un maravilloso trabajo de saxo. Dentro de las destacadas “Caught Insisde Your Heart” y “Leave Her To Heaven” son algo más rockeras, sobre todo la segunda con mayor presencia de guitarrera, mientras “In My Crystal Ball” es un manual de wimp con mezcla de sonidos eléctricos y acústicos, más o menos como sucede con “From L.A. To Tokyo”. Dentro de las más relajadas me quedo con “The Way Of The Night”, por la intensidad que consigue en los juegos de voces, y con “Only In My Dreams” con un muy buen solo de guitarra dentro de línea de piano marcando una muy buena balada. Hay otras que tampoco están mal como “Love Has Found His Way” o “Don’t Let Her Go” aunque más flojas y planas que las anteriores, o dos de los temas extra, el medio tiempo “Secrets In Her Heart” y la más movida “The Spark Of My Soul” que cumplen con solvencia. En conjunto un disco interesante para los seguidores del estilo que desarrolla, y que en su momento fue toda una pieza de coleccionismo, además con el añadido de los bonus que están a la altura de toda la obra. A los que grupos como Journey o Toto les parezcan demasiado blandos mejor que se olviden.

Mariano Palomo

RAIN “Stronger”

(MTM Music / Goi Music)

El pluriempleado vocalista germano Michael Bormann ha completado en este 2006 uno de sus años más prolíficos en lo que a producción discográfica se refiere. Tras abandonar hace un par de años el seno de Jaded Heart, la banda que le dio a conocer al gran público hace ya bastantes años y que actualmente apuesta por un hard rock más contundente y guitarrero, Michael se ha centrado en su carrera en solitario y en sus participaciones en proyectos más melódicos, como el último trabajo de Zeno y este segundo de Rain. Una banda formada en 1997 y que apenas tuvo repercusión con su debut “House Of Dreams” de 2002 y que ahora vuelve a la carga con un álbum fácil de escuchar, bastante acústico en muchos pasajes y con un claro tinte actual en sus composiciones, aunque sin olvidar las raíces e influencias más clásicas de gente como Def Leppard, Bon Jovi o los propios Jaded Heart. La voz de Bormann se muestra en bastante buena forma, sin forzar casi nunca y dando su versión más melódica aunque no exenta de fuerza. Además el frontman alemán también se hace cargo del bajo y los teclados, acompañándole el guitarrista, ideólogo, productor y fundador del grupo Lars Forseth, su compañero fundador Per Helge “Peppa” Bruvoll a la batería, y el guitarrista noruego Tore Moren que ha participado en los últimos trabajos de su compatriota Jorn Lande. Los once temas que componen este disco no muestran excesivos altibajos, tan correctos y comerciales, como previsibles y tranquilos en su inmensa mayoría. Empieza la cosa de forma sorpresiva con “Do You Like” un medio tiempo bastante tranquilo pero intenso de tesituras modernas. Se animan con “Insobriety” mucho más alegre con las guitarras directas y limpias. La onda moderna en las guitarras se repite en “Get Over It” o en la más corística a lo Leppard “Flesh & Blood” recordando también a lo último de Mad Max o Casanova, al igual que “Crazy” mucho más comercial con cierto rollo Bon Jovi actual. Aunque para sonido Bon Jovi los cortes más lentos del disco, buenas baladas como “I’d Die For You”, “The Other Side” o la más eléctrica “Lovesong”, cualquiera de ellas inspiradas claramente por las baladas de “These Days” o “Keep The Faith” de los de New Jersey y que dentro de su buen nivel se hacen un poco repetitivas, arreglos de cuerda incluidos. La vena más rockera y donde brillan más las guitarras de Moren la encontramos en “Let Me Be Your Favourite” un pellizco en el culo para hacernos mover el pie a base de buen hard clásico y potente. Algo que se pierde en las más modernas “Deserve It” que me parece la más floja del disco, y en la acústica de aires western “Love Is By Your Side” donde sus buenas voces mejoran a la anterior. Una vez escuchado este trabajo, y movidas personales aparte, quizá entendamos mejor la marcha de Bormann de Jaded Heart, aunque haya reminiscencias de éstos en el disco, pero esta claro que su idea a la hora de hacer música es mucho más relajada y moderna que la de sus ex compañeros. Aun sin llegar al nivel aquellos trabajos, este “Stronger” de Rain si es un disco digno y que agradará a los seguidores del rock melódico actual, y sobre todo a los más recientes de Bon Jovi.

Mariano Palomo

NORWAY “Rising Up From The Ashes”

(MTM Music / Goi Music)

“Resurgiendo de las cenizas”, así nada más y nada menos se presentan para el 2007 los norteamericanos Norway. Una banda a la que prácticamente habíamos perdido la pista tras la edición de su magnífico segundo trabajo “Arrival” que tuvimos ocasión de verles presentar en el añorado Gods of A.O.R. británico hace un lustro, y que fueron uno de los responsables junto a bandas como Change Of Heart, Newman o Age Of Reason de que se me ocurriera bautizar su sonido como “sonido Wigan” en referencia a la localidad que acogía el festival. Y parece que el tiempo, a pesar del cambio en la voz del original y carismático Glenn Pierson por el experimentado Dave Baldwin (ex Tradia o Departure entre otros) no ha hecho variar el sonido del grupo, con esa calidez compositiva que se desprende de la guitarra del gran Jim Santos, un talento a descubrir para muchos, y que también se encarga de coros y teclados, bien secundado por el batería Marty Brasington y el bajista Joe Slattery. Consiguen todos ellos facturar nueve magníficos temas, por desgracia minimizados por la pobre producción del disco, algo que ya les ocurrió con su primera obra “Night Dreams”, y que muestran el gran talento creador que les avala, sin necesidad de complicarse la vida en estériles experimentos ni recargas barrocas, simplemente haciendo buenos temas de rock melódico de agradable escucha, pero sin caer en la comercialidad por la comercialidad y con sus buenas dosis de guitarras de calidad. Los coros son otro de los puntos fuertes de la banda, con Santos y Slattery acompañando maravillosamente la gran voz de Baldwin, en todos los temas del disco tienen un destacado papel, basta escuchar temas tan intensos como “Since You’ve Been Gone”, el medio tiempo “Anything At All” o la más guitarrera cercana a Tyketto “Save Me”. No se quedan atrás ni mucho menos la alegre y directa “American Girl” con ese “sonido Wigan” más que palpable, al igual que la más tranquilas “Won’t Let You Down” que con su sonido acústico bien pudiera pasar por la segunda parte, menos intensa eso si, de “Love Of A Lifetime” de Firehouse, y “The Power Of Gold” con un gran trabajo de guitarras dentro de un corte más épico. Un trabajo que continua en “Tell Me”, más rockera con toques acústicos que empastan magníficamente con las voces siempre protagonistas y los más discretos arreglos de teclados. El cierre lo pone la extensa “Haunted” donde los ritmos relajado marcan la pauta de un tema más a medio tiempo que sirve como buen broche para una gran reentré (a pesar de la producción) de una de esas bandas que uno descubre casi por casualidad y que acaba convirtiéndose en formación de culto. Esperemos que no nos hagan esperar tanto para su próximo trabajo.

Mariano Palomo

NADIRA INDRA “Nunca Más”

(Vudu Records)

Hace unos días llegaba a nuestras manos el primer trabajo de este cuarteto asturiano formado íntegramente por féminas, y que a pesar de tener más de un año de antigüedad hemos querido presentaros ahora para que lo conozcáis. Este “Nunca Más” está conformado básicamente por composiciones de rock sencillo, bien elaborado y con muy buenas intenciones que se hacen asequibles al oído y que sin demasiadas pretensiones consiguen completar una interesante entrega. La abren con “Mírame” uno de sus temas más crudos y en el que ya empezamos a descubrir la bonita voz de Patty, con registros a medio camino de su paisana Ruth (Darna) y de Aurora Beltrán (Tahúres Zurdos). Continúan con el tema título y primer single claro, un tema de fácil estribillo con mucha llegada y que además contiene las partes de guitarra más elaboradas del disco a cargo de Lidia que es también la encargada de producirlo. Muestran su cara más dulce y relajada en la sentida balada “Cómplice De Piel” y en la acústica “Perdida” que me recuerda mucho a Tahúres Zurdos. Recuperar la faceta más rockera con “Otro Sueño” y con “C’mon” en la que las guitarras vuelven a sobresalir sobre la base que forman Blanca al bajo y la ya ex del grupo Bego a la batería, sustituida tras esta grabación por Luna. Por el contrario nos dejan cortes más oscuros como la dura “Falso Amor” en la que las voces brillan en un ambiente más tétrico, al igual que en la más lenta “Oscura Condena”. En la recta final nos encontramos con “Nada” un despechado tema con buenas guitarras, y con “Madre Tierra, Niña Luna” una bonita pieza lenta de cierta inspiración ecologista. En resumen una correcta primera obra por parte de esta joven banda y que además se completa con un currado video clip grabado en Londres del single “Nunca Más”. Afortunadamente las chicas siguen siendo guerreras.

Mariano Palomo

METATRONE “The Powerful Hand”

(Scarlet / Goi Music)

Los grupos heavies de temática cristiana siempre me han llamado la atención, no por su mensaje ya más que conocido y desgastado, si no por como se abren camino en esta jungla metalera habitualmente llena de vicios, malos hábitos y actitudes antagónicas a las de los que predican la palabra. Y el caso es que hay muchos más de lo que podemos pensar, lo que ocurre es que muchas veces por los prejuicios de unos y otros apenas se dejan ver por círculos muy reducidos de medios afines a la fe. Basta recordar el caso sucedido con la banda estandarte del rock cristiano, Stryper, hace unos meses vetados por los satánicos Slayer en el Festival mejicano de Monterrey y que motivó el aplazamiento del mismo hasta hace bien poquito. En cualquier caso también hay muchos que no llegan al gran público por su nivel musical que no alcanza para pasar el corte de la crítica, y puede que esto último sea aplicable a los italianos Metatrone que son los que nos ocupan. Una banda que apareció hace unos años y cuyo “The Powerful Hand” es lo primero de ellos que llega a nuestras manos, con una serie de temas en su mayoría bastante simples y predecibles, dentro de un power melódico cercano al de sus paisanos Labyrinth o Rhapsody, escuchando “The Song Begins” o “The Rock” esta llena de coros líricos femeninos, la imagen de la banda de Turilli y Scaropolli es inevitable en nuestra memoria. Pero sorpresivamente al final del disco nos encontramos con dos interesantísimos cortes más hard rockeros y que salvan bastante la nota del trabajo, se trata de “The Prince” y “Not Afraid” en las que las guitarras aceleradas y las bases desbocadas dejan sitio a la mejor interpretación vocal de Jo Lombardo y a los ritmos más alegres y asequibles sin perder nada de fuerza, y que en el caso de la segunda pieza está muy cerca de los americanos Mass, otros referentes del estilo apadrinados por Michael Sweet. Al final un emotivo “Ave María” pone cierre a este disco que hay que escuchar enterito para descubrir las buenas cosas que encierra en su interior, muy propio del Cristianismo y de todas las religiones. Esperemos que independientemente de sus creencias estos chicos puedan darnos más trabajos en la onda de sus dos temas destacados en esta crónica, si no, tengo la sensación que se perderán entre el mogollón de bandas power metaleras del viejo continente.

Mariano Palomo

FINAL FRONTIER “Freelight”

(Escape Music / Goi Music)

El dúo formado por el vocalista Rob Moratti y por el multiinstrumentista, ex de 24K y Von Groove, Mladen, vuelve a la carga en 2006 con Final Frontier. Con su hard rock lleno de melodías pegadizas, voces finas y agudas, y destacada presencia de guitarras, nos ofrecen “Freelight”, su cuarta entrega que sigue el mismo nivel de calidad y pegada comercial de sus predecesoras. En esta ocasión cuentan una vez más con la remarcable colaboración del guitarrista Lawrence Falconer que pone su buen hacer al servicio de siete de los doce temas que componen la obra, y por primera vez con el buen batería Kevin Howley, que no hacen más que pulir el sonido de un disco totalmente recomendable para los seguidores de las formaciones más clásicas de rock melódico con voces agudas, caso de Shy o TNT por poner algunos ejemplos. El disco se abre con enorme fuerza mediante el tema que le da título, cañero y pegadizo, al igual que la siguiente “Dynamo” con un machacón estribillo y en el que las voces sobresalen. Más melódicas, muy en la línea de los últimos Shy, encontramos “Foolish Pride”, un maravilloso corte lleno de elegancia y calidad, y con un buenísimo solo de guitarra a cargo de Falconer, y la no menos buena “Only The Lonely” en la que los coros captan nuestra atención sin remedio. La historia se tranquiliza con la bonita y sentida balada “I Hope You Don’t Mind”, aunque se hace un poco larga. Vuelve la alegría con el ritmo marcado por “Someone’s Watching You”, muy Survivor de la mejor época y que muestra la gran calidad de la banda haciendo puro A.O.R. A partir de aquí baja un poco el nivel, siendo buenos los siguientes temas no llegan al nivel de los comentados, lo tenían complicado, pero aun así es resaltable la marchilla del estribillo y el buen solo de “All The Way” aunque queda algo simple, los coros y las teclas del medio tiempo “Nothing Is Easy”, la intensidad en las guitarras de “Lion’s Den”, la teatralidad y pomposidad de la machacona “The Witches Mask”, la elegancia algo sosa del medio tiempo “Half Way Home” el primer bonus, al que sigue “Delia” una monótona balada llena de piano y acústica que no aporta demasiado, pero que sirve como bonito y correcto cierre del álbum. Un álbum que empieza como un auténtico cañón en su primera mitad, que mantiene un buen nivel en la segunda, y que nos muestra una vez más el potencial de esta banda que parece consolidarse con el tiempo. Esperemos que así sea y nos sigan obsequiando con nuevos trabajos de este nivel.

Mariano Palomo

FAITH AND FIRE “Accelerator”

(Metal Heaven / Goi Music)

Tras las referencias que me habían dado de este disco y viendo quienes eran los protagonistas de este nuevo proyecto, la verdad es que esperaba bastante más de lo que a la postre me he encontrado en el redondo que nos ocupa. Y este no es otro que el debut discográfico de una nueva banda que bajo el nombre de Faith And Fire reúne a cuatro expertos y reputados músicos de la escena hard & heavy norteamericana, como son los que fueran compañeros en Riot Tony Moore a las voces y Mike Flyntz que sigue acompañando a Mark Reale como segundo guitarrista dentro de la banda de Nueva York, el bajista Danny Miranda que ha estado con Queen en su última etapa, y el batería John Miceli que ha formado parte de Rainbow o Meat Loaf entre otros. Con estos antecedentes era de esperar un disco mucho más brillante y con mucha más pegada de lo que finalmente ha resultado. En buena parte esa falta de brillantez me temo que se debe a la deficiente producción y sonido que probablemente no hagan justicia a la calidad de las composiciones, algo que se intuye en algunos cortes como la melódica y extensa “Villanelle” de interesante estribillo en la que el bajo de Miranda tiene un gran protagonismo, al igual que en la movida de buenos coros “Everything”. La brillantez aparece en mayor medida con el tema que da nombre a la banda, un corte de hard rock directo y divertido y en “Avenue Z” o en “America” en las que la guitarra de Flyntz suena bastante más clara, aunque lejos de lo que pudimos comprobar en su actuación con Riot en Madrid. Tampoco está mal la balada “”Breathe”, una pieza con toques acústicos en la que resalta más la voz de Moore bien acompañada por unos bonitos coros. Una voz que cumple en todo el disco aunque lejos de los excesos de agudos del recordado “Thundersteel”, que parecen querer rememorar en el inicio de “Fallen”, con unas guitarras más afiladas y un ritmo más aceleradas pero que enseguida se queda en un espejismo a pesar del buen solo de Flyntz y del breve grito de Moore. El resto bastante normalito, “Ashes” es una correcta balada oscurecida sobremanera por la opacidad del su sonido, “Accelerator” tres cuartas partes de lo mismo a pesar de su título perdiéndose en experimentos de guitarra en mitad del tema y sin nada de brillo, o “Angel” otra balada que esta vez sí tiene mayor feeling y nivel con cada cosa en su sitio. Una pequeña decepción la que me he llevado con Faith And Fire, aunque seguro que alguno no estará de acuerdo y le encontrará más virtudes a este trabajo, yo desde luego creo que tiene algunas importantes carencias, más teniendo en cuenta el nivel y experiencia de sus músicos.

Mariano Palomo

DOMAIN “Stardawn”

(Limb Music / Goi Music)

Estamos ante el disco que puede marcar el final de una etapa en la singladura del proyecto del guitarrista Axel “Ironfinger” Ritt. Y hay varios hechos que nos hacen pensar esto. En primer lugar, tras la publicación de este trabajo el vocalista Carsten “Lizard” Schulz ha abandonado la banda para centrarse en otros proyectos como Evidence One; Segundo, la edición especial del disco se publica con un segundo CD recopilatorio y un DVD; y tercero cierran este “Stardawn” con “Shadowfall”, una pieza épica de más de veinticinco minutos dividida en siete capítulos y que parece servir como epílogo para la carrera de Domain. Por el momento lo mejor que podemos hacer es disfrutar de este redondo que una vez más recoge la calidad y clase compositiva e interpretativa de Ritt y compañía con su rock melódico potente y teatral, bastante barroco y pomposo por momentos, y en el que el hacha germano es el principal protagonista. Desde el inicio de la rápida “All In The Name Of Fire” vemos quien lleva las riendas, con una veloz entrada de guitarra que ya capta nuestra atención. Sigue la cosa más melódica con “Temple Of The Earth” un magnífico corte de rock melódico bien adornado con arreglos de teclas a cargo de Erdmann Lange. Unas teclas que siguen siendo protagonistas en su faceta más pomposas en “Don’t Pay The Ferryman”, una buena adaptación del tema de Chris De Burgh, y de forma más tranquila con el piano en la tierna balada “I Ain’t No Hero”. Vuelve la caña con la más rockera y vacilona “Headfirs Into Disaster” que se sale de la línea habitual del grupo y que resulta fresca y divertida dentro de la estructura más elaborada del resto de los temas, aunque sigue teniendo su buena ración de coros y arreglos de piano, pero mucho más sencillos. Tras esta pequeña licencia, recuperan su línea habitual con un extenso tema de más de nueve minutos que da título al disco y en el que se explayan a gusto con sus desarrollos instrumentales. Más épica de coros cerveceros “Crystal Stone Island” otra de las marcas de la casa, mientras “Help Me Through The Storm” tiene una onda más clásica con un sonido de teclados muy Purple en su inicio. El cierre lo pone la comentada anteriormente “Shadowfall” con sus siete capítulos que prácticamente conforman otro disco dentro del disco, lleno de cambios e influencias operísticas y que me recuerda un poco a Nostradamus (la ópera rock de Nikolo Kotzev). Un cierre grandilocuente para un muy buen disco y quien sabe si para una muy buena etapa. Esperemos acontecimientos.

Mariano Palomo

DAWN OF SILENCE “Moment Of Weakness”

(Metal Heaven / Goi Music)

“Swedish Melodic Heavy Metal”, nada más y nada menos. Así se presentan estos cuatro jóvenes suecos y eso es lo que nos ofrecen en su ópera prima, una docena de buenos cortes de heavy metal melódico de la escuela sueca, pero con muchas influencias británicas, sobre todo de sus amados Iron Maiden a los que empezaron versioneando en sus principios hasta hace cuatro años se metieron en estudio para registrar su primera demo, a la que siguieron otras cuatro hasta llegar a la publicación de este su primer disco oficial. Un trabajo muy competente, con un sonido brillante, y que sin brillar por su originalidad sí lo hace por la calidad de sus temas, como la enérgica “Hands Of Fate” que sirve como buena apertura del álbum, las más cercanas a sus paisanos Hammerfall o a los primeros Edguy caso de “Out Of Time”, “Secret Of Truth”, “Seven Gates”, “Misguided Life” o “Moment Of Weakness” donde los coros épicos contrarrestan las afiladas guitarras de Mats Johansson, sobre la potente pegada del batería Torbjörn Edqvist. La voz de Patrik Johansson es de lo más destacado del trabajo, y aunque no tiene nada que ver con el vocalista de Astral Doors de igual nombre, sí resulta potente y llamativa, recordando en algunas fases al Joaquim Cans de los citados Hammerfall, y en otras inevitablemente a Bruce Dickinson, caso de “Fire & Ice” o “Long Time Dead”, aunque esta última musicalmente tiene un aire más Judas Priest de la última época. Las guitarras dobladas a lo Maiden están bastante presentes, escuchar “Midnight” o “Point Of No Return”, aunque no tanto el bajo de Mats (el tercer Johansson del grupo), que no destaca tanto como el de Harris con la Doncella. Dada la juventud de los chicos es normal que dejen presentes sus influencias en su primer disco, nada malas por otra parte, pero si consiguen tener mayor personalidad propia a la hora de componer y siguen creciendo en su buen nivel instrumental pueden ser una interesante formación a seguir en el futuro. Estaremos atentos.

Mariano Palomo

DA VINCI “Back In Business” (Reedición)

(MTM Classix / Goi Music)

Como presagiábamos hace unos meses con la reedición del primer disco de estos chicos noruegos, no han tardado en recuperar su segunda entrega “Back In Business” publicada por Polygram en 1989 (eran otros tiempos para el A.O.R. escandinavo en el que las multinacionales apostaban por este estilo). Y para el que no la conociera en su momento decir que supera ligeramente a su primera entrega, sobre todo por la inclusión de cortes como la inicial “Touchdown” todo un ejemplo de lo que debe ser un tema de A.O.R. divertido y directo, o el bonito medio tiempo “Call Me A Liar” muy cercano a sus vecinos Treat. Las guitarras de Gunnar Westlie están mucho más presentes, compartiendo primeros planos con las voces encabezadas por el buen vocalista Robert Ass y las correctas teclas de Dag Selbosbar. Los coros se hacen especialmente presentes en las fiesteras a lo Sha-Boom “9 And 10” o “Pink Champagne”, y por supuesto en los temas más lentos, como las baladas “Young Hearts” o la emotiva “Turn Down The Lights”. Se completa el disco con la movida aunque algo plana “Million Like Us”, los medios tiempos algo intimistas “Circus Maximus” o la bien arreglada “Last Time”, la más rockera y guitarrera “Hold Back The Tears” y el caramelito para coleccionistas “Blame It On The Radio” que aparece como tema extra y que es otro interesante tema, con gran solo de guitarra y que mantiene el buen nivel general del trabajo. Una buena oportunidad para hacerse con este CD que llegó a ser de culto en su momento para los seguidores de los sonidos melódicos y que ahora no deben dejar escapar.

Mariano Palomo

BURNING POINT “Burned Down The Enemy”

(Metal Heaven / Goi Music)

Desde las frías tierras finlandesas llega a nuestras manos “Burned Down The Enemy” el tercer larga duración del cuarteto Burning Point. Una solvente formación integrada por el potente vocalista, bajista y guitarrista Pete Ahonen, el interesante teclista Jussi Otero, el también guitarrista Peca Kulivuori, el batería Jari Kaiponen y por el bajista en la mayoría de los cortes Jukka Jokikokko. Entre todos ellos han elaborado un más que correcto trabajo de power metal melódico, con bastante protagonismo de las teclas de Otero y en la que coros y guitarras tampoco desentonan, pero que adolece de excesiva duración en la bastantes temas y por momentos algo espeso en su desarrollo. En cualquier caso encontramos algunos bastante destacables, como “Heart Of Gold” bastante melódica marcada por unas brillantes teclas dentro de un ritmo más pausado que recuerda vagamente a los Queensryche del “Empire”, o “To Hell And Back” mucho más acelerada y dinámica con un constante duelo de teclas y guitarras de lo más interesante del disco. También resaltable la final y épica “Burned Down The Enemy”, en la que los cambios de ritmo crean buenos ambientes con buenos solos de guitarra y aportaciones de nuevo de los teclados. No son malas, pero sí más pesadas y oscuras otras como el medio tiempo “From The Begening Of It All” o “Icebound” en una onda Circle II Circle o Savatage de Zakk Stevens, mientras “Eye For An Eye” es algo más brillante por su buen estribillo. Por supuesto no faltan los momentos acelerados que recuerdan a sus paisanos Stratovarius, como es el caso de la inicial “Parasite” o de la más melódica “Against The Mandes Of Time”. Todo ello con un sonido bastante bueno y una producción a la altura de los archiconocidos estudios Finnvox y que sin descubrir nada está un poco por encima de la media de creatividad y calidad del estilo pudiendo resultar interesante para los seguidores del metal melódico y de las bandas citadas anteriormente.

Mariano Palomo

BLACKMORE’S NIGHT “Winter Carols”

(AFM / Avispa)

Mr. Blackmore y Señora vuelven con disco por Navidad. En esta ocasión el maestro Ritchie y la preciosa Candice se han marcado un oportuno compendio de temas navideños de origen medieval y renacentista, que según parece acostumbraba a interpretar el guitarrista británico en su niñez. Evidentemente, como casi toda la obra de Blackmore’s Night tras la disolución de los añorados Rainbow, los temas están totalmente alejados del rock, pero son preciosas composiciones para atemperar el espíritu que tampoco viene mal de vez en cuando. Una colección de villancicos, algunos conocidos por aquí como “Christmas Eve”, “Come All Ye Faithfull” (Adeste Fideles), “Ding Dong Merrily On High” o “We Wish You A Merry Christmas”, en los que la suave voz de Candice Night acaricia nuestros oídos junto con los coros de Lady Madeline y Lady Nancy (The Sisters of The Moon). Como era de esperar Blackmore se hace cargo de casi todos los instrumentos, desde su inseparable guitarra (aunque no sea la stratocaster) o las percusiones hasta otros menos usuales y propios de la época que ahora cultiva como el mandolín o el arpa; mientras que los teclados y arreglos orquestales también presentes, sobre todo en algunos temas como “We Three Kings”, corren a cargo del conocido Pat Regan. Como curiosidades destacar la instrumental “Winter (Basse Dance)” y la recuperada “Wish You Where Here” que ya apareció en su primera entrega “Shadow Of The Moon” y que es todo un acierto aunque más que un villancico es una canción de amor, pero de lo mejor que ha grabado Blackmore’s Night. La historia medievo-renacentista del Man In Black parece que sigue adelante y que no tiene intención de volver al terreno más rockero para volar sobre el arco iris, una auténtica lástima para sus seguidores de siempre. Por ahora tendremos que conformarnos con lo que hay, que no es poco, pero nos sabe a poco.

Mariano Palomo

BISS “Xtension”

(AOR Heaven / Goi Music)

La dupla formada por el guitarrista Ralf Heyne y el vocalista Marc Storace para estabilizarse definitivamente al frente de Biss. Una formación que tras pasar por numerosos cambios de formación ha encontrado en esta pareja de buenos y veteranos músicos la fórmula para desarrollar su hard & heavy de corte melódico pero bastante potente. Junto Heyne y Storace completan la alineación de Biss el bajista Lars Wilke y el batería Carsten Witte, consiguiendo todos ellos dar forma a una compacta obra bajo el título de “Xtension”, en mi opinión la más completa de las cuatro publicadas por la banda. Entre los temas encontramos el heavy cañero y poderoso de afiliados riffs de “Run For Your Life” que aderezan con algún que otro original arreglo (algo que se repite a lo largo del disco con irregular fortuna), al igual que en “Shot It Out” en la que el estribillo bien marcado rivaliza en protagonismo con un buen solo de guitarra de Heyne. Más o menos siguen la misma línea en la dinámica y fresca “V Card”, en la menos acertada por densa “Born To Ride”, y también la endurecida versión del clásico “Barracuda” de Heart al que dan un giro realmente potente con las guitarras entrando a cañón que contrasta con la voz más melódica de Storace. La melodía es protagonista también en “Always” en una onda más hardrockera, y que a pesar de nuevo de esos extraños toques modernos en algunos arreglos es una de las destacadas con cierto aire a Glenn Hughes (no en vano Storace compartió formación en Amen con “La Voz del Rock”), al igual que sucede en la final “Catch 22” con buenos juegos de voces dentro de su ritmo más cadencioso. Más monótonas y espesas se me hacen “Eagle” a la que no acabo de coger el punto y “Train Of Thoughts” cuyo buen sonido de guitarras se pierde dentro de una estructura demasiado densa. Dejo para el final “Blood On The Sand” una de las más destacadas en lo que a guitarras se refiere, con una estructura mucho más hard rockera que me ha convencido plenamente, y en la que colabora en su composición el gran Matt Sinner (Primal Fear, Sinner). En resumen, un disco bastante completo, que aun adolece de homogeneidad y falta de frescura en algunos pasajes, pero que es un digno referente del metal melódico centroeuropeo contemporáneo.

Mariano Palomo